Aunque sin el récord del 2015, cuando fue el hospital que más órganos trasplantó de toda España, el Chuac reiteró ayer el agradecimiento a donantes, familias y trabajadores por el esfuerzo para que desde la periferia gallega se siga en primera línea en las segundas oportunidades vitales. Con 235 trasplantes en el 2016, la tercera mejor cifra del histórico del centro y la sexta del país en el último año, el coruñés es líder estatal en el recambio de corazones. Solo tres centros realizan más de veinte al año y el Chuac alcanzó, con La Fe de Valencia, 29. A ellos se sumaron 114 de riñón, 26 de ellos de donante vivo, 48 de hígado, 39 de pulmón y 5 de páncreas.
Esas 235 nuevas oportunidades pusieron la cara a una actividad que también tuvo su cruz. «La donación ha disminuido de forma significativa y toda la sociedad debe reflexionar sobre ello», subrayó Antón Fernández, coordinador de trasplantes. Galicia arrastra la tasa de negativas familiares a donar más alta de España y el Chuac, con un 32 %, alcanzó la peor de los últimos años, el doble que la media nacional.
En esta misma línea, José Cuenca, jefe de Cirugía Cardíaca, subrayó la importancia de sensibilizar acerca de un ejercicio de generosidad sin el que nada es posible. «Siempre tenemos un déficit de un 25 a un 30 % de órganos que por ahora paliamos con donantes de fuera; hoy por hoy, la población gallega es la que más posibilidades tiene de ser trasplantada, en corazón prácticamente el doble de probabilidades que el resto de españoles, pero esto no va a ser sostenible si no somos capaces de conseguir que se done más».
Con un año en el que «una de cada tres familias decidió no donar», subrayó Fernández, reducir esas negativas, arraigadas en el especial culto a la muerte sobre todo en el rural, es el principal reto para este año, con el objetivo de reducir una lista de espera en la que a 31 de diciembre estaban 199 personas pendientes de un riñón, 32 de un hígado, 24 de un pulmón, 17 por un páncreas y 4 por un corazón. «Aunque nuestras cifras de mortalidad en espera son seguramente de las mejores -2,9 % en corazón, 1,1 % en hígado y 1,4 % en pulmón- subir la donación no solo nos permitiría hacer más trasplantes, sino que afectaría a la calidad de vida del que está esperando», subrayó José Manuel Vázquez, jefe de Cardiología.